En un giro inesperado, George Clooney ha sorprendido a todos con un anuncio impactante: está harto de Estados Unidos, mientras gesticulaba hacia su perfectamente esculpida línea de cabello. Sí, amigos, lo han leído bien, este zorro plateado está prometiendo abandonar el país del que está cansado. Declaró: “Simplemente no puedo soportarlo más.”

Y para ser honesto, no podemos culparlo. Quiero decir, ¿han visto el estado de nuestra política últimamente? Es como un mal episodio de “Las verdaderas amas de casa de DC”—sin los platos voladores, porque, seamos realistas, nuestros políticos están demasiado ocupados volteando panqueques en la Feria Estatal de Iowa.

Pero me pregunto por qué este actor de primer nivel de Hollywood quiere abandonar el barco. ¿Es porque no pudo encontrar café decente? ¿La escasez de roles decentes para actores en edad avanzada como él? ¡No! Bueno, amigos, no creo que sea algo tan simple; es mucho más oscuro. Joe Biden se ha negado a colgar sus botas. Oh, vamos, Clooney, ¿acaso no te gusta él?

Y él estaba como… ¿Cuál es esta obsesión del Partido Demócrata con la recaudación de fondos? Quiero decir, ¿por qué no simplemente tienen un buffet o una fiesta de compartir comida?

En una entrevista reciente, Clooney expresó tristemente sus pensamientos: “Estoy exhausto de escribir cheques para asistir a eventos donde lo único que se sirve es un lado de decepción.” Así es; es como si intentaran competir entre ellos en un juego de “¿Quién puede pedir más dinero sin hacer realmente nada?”

Clooney ha intentado mucho desde que lo escribió en The New York Times y suplicó al presidente Joe Biden que se hiciera a un lado por el bien de este país. Y seamos honestos, por el bien de nuestros ojos, que han tenido que tolerar esas actuaciones penosas en los debates. Ah, tenías razón, Clooney; ¡nosotros tampoco lo podemos soportar!

Pero, esperen… Clooney no solo está abandonando a Biden; está dejando Estados Unidos. Así es, amigos, ha tenido suficiente de nuestras tonterías. Y, honestamente, ¿quién puede culparlo? Quiero decir, ¿conocen los precios del aguacate en tostadas en Los Ángeles últimamente? Es como si te cobraran por cada reunión de 1.1 con un influencer de Instagram. Y ni siquiera hablemos del tráfico – “He visto glaciares moviéndose más rápido,” bromeó.

Mientras Clooney se prepara para dejar Estados Unidos por un lugar mejor y más verde, no puedo evitar preguntarme quién será el siguiente. ¿Creen que podría ser Julia Roberts porque no encuentra buenos papeles en comedias románticas? ¿O podría ser Barack Obama porque está cansado de que le pidan asistir a cada recaudación de fondos demócrata? Obama estaba como… “¿No pueden dejarme disfrutar de mi retiro en paz?” Eso es realmente molesto.

Ahora, sé lo que están pensando: “Pero George, ¿qué pasa con todos los buenos tiempos? ¿Las recaudaciones de fondos de Obama? ¿Las apariciones de Julia Roberts?” Y a eso, Clooney dice: “Bah, tengo cosas mejores que hacer que asistir a fiestas de cócteles sobrevaloradas con un grupo de élites fuera de contacto.”

Una cosa es segura, amigos: Estados Unidos ha perdido su encanto. Y si no nos ponemos las pilas, perderemos mucho más que solo el cabello perfectamente peinado de George Clooney.